sábado, 3 de enero de 2009

Wall - E.

He comenzado el año con ganas de cambio. Dejamos los colores grisáceos del entorno de fantasía en el que me he estado refugiando en los últimos meses para pasar a un entorno un poco más oscuro, pero como mi Peter Pan personal se niega (y yo no quiero que se vaya) a abandonar esta simbiosis en la que se resumen nuestra relación, os queremos presentar a un nuevo amigo que andará por este blog siempre que él quiera: Wall E. Este robotito con corazón y con una expresividad capaz de traspasar nuestras almas metálicas con tan solo una caída de ojos bombilla me ha tenido totalmente entregado en su historia magistral. Con prácticamente más de la mitad de la película sin articular palabra (todo a un bienvenido homenaje al cine mudo y es que con un personaje como Wall E y el entorno en el que se mueve, no hacen faltan palabras), siendo partícipe de su relación de amistad con un pequeño insecto que hace olvidar las fobias hacia demás congéneres de su especie y con su linda historia de amor como pocas con otro robot, de aspecto femenino y con mucho carácter. En definitiva, una obra maestra con la que he cerrado el año y he comenzado el nuevo. Señor@s, si todavía no han visto esta película... pidánsela a los Reyes Magos que seguro la regalaran gustosos. Les dejo el trailer.